Los anemómetros ultrasónicos miden la velocidad y la dirección horizontal del viento, así como la temperatura. El anemómetro ultrasónico 3D sirve para medir la dirección y la velocidad del viento de todas las direcciones. El anemómetro, que no necesita mantenimiento ni recalibración, puede equiparse con una calefacción para su funcionamiento en invierno, incluso en condiciones extremas.
Todos los cálculos son realizados por un procesador de señales digitales (DSP) de alta capacidad dentro del tiempo de propagación de las señales ultrasónicas con una precisión de 32 bits. El sensor ofrece funciones estadísticas integrales, como el promedio de deslizamiento, la desviación estándar, etc., que se pueden seleccionar desde la interfaz digital. El promedio de deslizamiento se puede ajustar opcionalmente en forma vectorial o escalar, de forma idéntica o diferente para cada parámetro.